Al final fue la paz, porque todo estaba cumplido.

Al final fue la confianza, al final fue la certeza,…ahora será la tierra la que quede en tinieblas…

Ya todo ha terminado, Jesús de N. duerme, entra en el descanso merecido.

Lavaremos tu cuerpo, besamos tus heridas.

Y ahora te sembramos en el huerto, esperando que sea primavera;

lleva la Buena noticia a los que han muerto,

devuelve a Adán la libertad primera, y no tardes en volver a nuestro huerto.