El trozo del madero 

es aliciente

para llegar

hasta aquí y quedar con Él.

Todo santuario 

es lugar de encuentro 

donde expresar la fe

con la liturgia y oración 

que nos llevan de la mano.

En el interior o a cielo descubierto

está el sitio indicado

al que hemos llegado

para este rato sincero

de intimidad. 

(Toño Mtnez)